Estudios recientes han demostrado la importancia de las lesiones secundarias en el resultado final de los pacientes afectos de un traumatismo craneoencefálico grave (TCEG). Entre las lesiones secundarias, revisten una especial importancia las lesiones hipóxico-isquémicas cerebrales. La potencial reversibilidad en algunos casos de las lesiones isquémicas, sugiere la necesidad de un diagnóstico precoz y adecuado de las mismas. La monitorización de la hemodinámica y del metabolismo cerebral a partir de las diferencias arteriovenosas de oxígeno y lactatos, permite detectar alteraciones del metabolismo energético celular.

A pesar de que diversos autores preconizan este sistema de monitorización, la literatura que existe al respecto es escasa y controvertida. En este trabajo pretendemos exponer los fundamentos, indicaciones y limitaciones del método, ya que su uso rutinario puede contribuir a la racionalización de las medidas terapéuticas y, en último término, a mejorar el pronóstico de los pacientes con un TCE grave.

Recent studies have shown the importance of secondary lesions in the final outcome of patients suffering from severe head injury. Among secondary lesions, hypoxic-ischemic injury is of special importance. Possible reversibility of ischemic damage suggests the need of an early diagnosis of these lesions. Monitorization of hemodynamics and cerebral metabolism by measuring the arteriovenous differences of oxygen and lactates may allow to detect significant alterations in brain metabolism. Some authors have considered this method of monitoring to be controversial. The object of this study is to describe the basic methodology, the indications and the limitations of this method wich may contribute to the rationalitation of therapeutic manouvers and improve the final outcome of severe head injuried patients.