Introducción: El hematoma subdural es una patología propia de la edad avanzada. Presentamos el caso de una mujer de 19 años con hematomas subdurales crónicos.

Caso clínico: Paciente de 19 años con antecedentes de migraña y estrabismo acude a nuestro centro un cuadro clínico de cinco días de evolución de cefalea y fotofobia acompañadas de bradipsiquia y vómitos incoercibles de aproximadamente 6 horas de evolución. El dolor comenzó mientras esquiaba. A la exploración física, presentaba mal estado general, se encontraba postrada en silla de ruedas y mostraba importante bradipsiquia. Se encontraba orientada y obedecía órdenes sencillas. No se evidenció clara focalidad neurológica, salvo por una paresia del VI par izquierdo conocida. La fuerza se encontraba disminuida 4/5 de forma global. Al fondo de ojo, se evidenció papiledema bilateral. El TC de cerebro mostró hematomas subdurales subagudos hemisféricos bilaterales, ambos de un espesor máximo de 2 cm. Producían efecto de masa y borramiento de surcos. Asimismo, se encontró un quiste aracnoideo temporal izquierdo ya conocido. Una angioTC y una arteriografía no aportaron hallazgos significativos. Se realizó una evacuación por trépanos bilaterales, sin intercurrencias, luego de lo cual evolucionó favorablemente con importante mejoría neurológica. Se solicitó una resonancia magnética del neuroeje. En el estudio de columna se identificó un quiste radicular T1-T2 derecho con mínimo derrame pleural adyacente. La paciente continuó evolucionando favorablemente y fue dada de alta en el día 10, encontrándose asintomática.

Discusión: La ruptura de un quiste perirradicular espinal es una de las causas de pérdida de LCR, pudiendo producir síndrome de hipotensión intracraneal espontánea y como consecuencia, hematomas subdurales en pacientes jóvenes. Este caso resalta la importancia de ampliar el estudio con una resonancia magnética espinal en pacientes jóvenes que se presenten con hematomas subdurales.