Introducción: Los meningiomas se encuentran entre los tumores primarios intracraneales más frecuentes. Estudios previos han revelado que los meningiomas benignos difieren de forma significativa en su metabolismo de glucosa en comparación con lesiones agresivas. Sin embargo, aún no se ha encontrado una correlación entre el metabolismo sistémico de la glucosa y el metabolismo del tumor.

Métodos: Nuestra hipótesis es que los niveles crónicos de glucemia (hemoglobina glucosilada (HbA1c)) son diferentes en pacientes con meningiomas agresivos y benignos. Se realizó un análisis retrospectivo multicéntrico de pacientes intervenidos mediante resección de meningiomas intracraneales. Se recogieron datos epidemiológicos, clínico-quirúrgicos, analíticos y anatomopatológicos. Se analizó la relación entre el grado histológico y los valores HbA1c, así como con el índice de proliferación Ki67.

Resultados: Se incluyeron 71 pacientes con meningiomas intracraneales de novo, entre los cuales un 25,35% fueron de grado 2. Nuestros resultados muestran que los pacientes con meningiomas de grado 2 tiene valores de HbA1c significativamente más altos en comparación con los pacientes con lesiones de grado 1 (p = 0,0290). También encontramos un número importante de pacientes (38%) con hiperglucemia crónica. La relación entre Ki67 y HbA1c no fue estadísticamente significativa.

Conclusiones: Tras analizar nuestros resultados, proponemos que el metabolismo sistémico de la glucosa es un factor importante en el desarrollo y progresión del meningioma. Esto podría suponer un cambio en el abordaje de este tipo de lesiones, debiendo valorarse un tratamiento más agresivo y una vigilancia posquirúrgica más estrecha en pacientes con hiperglucemias crónicas. Nuestros resultados también sugieren que estos pacientes podrían tener un alto riesgo de sufrir alteraciones de la glucemia infratratadas. Este hallazgo es especialmente importante considerando el uso habitual de corticosteroides como tratamiento antiedematoso. Investigaciones adicionales en esta área podrían conducir a una mejor comprensión de los meningiomas y tener un impacto clínico.