Introducción: La radioterapia intraoperatoria (IORT) ha emergido como una estrategia adyuvante en el tratamiento de metástasis cerebrales, proporcionando una administración focal de radiación durante la cirugía de resección. Esta técnica permite una mayor dosis localizada, minimizando la toxicidad en tejidos sanos adyacentes y optimizando el control local del tumor. Objetivo: evaluar la efectividad de la IORT tras la resección de metástasis cerebrales, partiendo del análisis de dos casos clínicos, valorando el control local de la enfermedad y los desenlaces clínicos posoperatorios. Se presentan dos pacientes con metástasis cerebrales únicas, candidatos a cirugía:

Casos clínicos: Paciente con antecedentes de cáncer de cérvix, ingresó por cefalea, trastorno comportamental y hemianopsia homónima izquierda, objetivándose una tumoración de 40 × 48 × 46 mm occipital, parasagital derecha, sugestiva de metástasis. Tratada mediante craneotomía con resección macroscópica completa y IORT (dosis de 30 Gy) en el lecho quirúrgico. Paciente diagnosticado de adenocarcinoma pulmonar, asociando hemihipoestesia derecha, y hemianopsia homónima ipsilateral, con hallazgo de tumoración cerebral de 20 × 21 × 20 mm occipito-parietal izquierda; precisando de craneotomía con resección macroscópicamente completa, seguida de IORT (20 Gy) en lecho quirúrgico. Evolutivamente, la primera paciente presentó control local sin evidencia de lesión en los controles radiológicos, durante un año, objetivándose, entonces, importante recidiva metastásica, infiltrando la prensa de Herófilo, siendo irresecable. El segundo paciente presentó, en la RM posquirúrgica, pequeño resto tumoral, estable evolutivamente, en los controles radiológicos realizados, con ausencia de complicaciones neurológicas agudas posoperatorias ni radionecrosis significativa. Ninguno de ellos ha presentado alteraciones cicatriciales asociadas a la radioterapia.

Discusión: La IORT es una herramienta prometedora en el manejo de metástasis cerebrales resecables, proporcionando un control local efectivo con un perfil de toxicidad aceptable. Su implementación en protocolos multidisciplinarios podría optimizar los resultados oncológicos y funcionales en pacientes seleccionados. Se requieren estudios prospectivos para validar su beneficio a largo plazo.