Objetivos: Exponemos nuestra experiencia inicial en la colocación de tornillos transpediculares C1-C2 mediante asistencia del sistema O-arm. Descripción de la técnica y análisis de resultados.

Métodos: Recogemos nuestros primeros casos desde mayo 2017 a febrero de 2018, con seguimiento mínimo de un año. Se analizan 4 pacientes, 3 hombres y 1 mujer, de entre 63 y 87 años, los cuales precisaron fijación del complejo C1-C2 todos ellos por fracturas tipo II de odontoides que no eran favorables para estabilización mediante colocación de tornillo odontoideo vía anterior. Describimos la técnica y analizamos la eficacia de la misma.

Resultados: A los 6 meses tenemos una consolidación ósea en 50% y en 11 meses una consolidación del 100%. Como complicaciones describimos una úlcera asociada a collarín rígido y un exitus.

Conclusiones: La colocación de tornillos transpediculares nos permite minimizar el riesgo de daño vascular y/o nervioso, así como un menor sangrado intraoperatorio. El uso de fluoroscopia 3D nos permite acortar la curva de aprendizaje, menor dependencia en la experiencia del cirujano y otorga mayor confianza, aunque no excluye un conocimiento exhaustivo de la anatomía cervical.